El Informe se basó en datos de 116 parlamentos y focus groups que involucraron a 49 parlamentos, entre los cuales se analizó el Congreso de Argentina. Según la publicación de la UIP, la pandemia ha sido una oportunidad para dar pasos audaces para modernizar los parlamentos con tecnología digital.
Dicha innovación pasó por tres fases: la innovación forzada, ya que los parlamentos tuvieron que responder rápidamente; la mejora de las soluciones de trabajo; y la consolidación del nuevo enfoque, con la adopción de procesos y herramientas para integrar las nuevas formas de trabajar en el tejido cotidiano de la vida parlamentaria.
El Informe Mundial sobre el Parlamento Electrónico 2020 indicó que, a finales de 2020, el 65% de los parlamentos encuestados había celebrado comisiones virtuales o reuniones híbridas y el 33% una reunión plenaria virtual o híbrida.
Asimismo, reconoció que la forma de trabajar de los parlamentos ha cambiado mediante el trabajo a distancia y una mayor confianza sobre herramientas y soluciones digitales.
Según la publicación internacional, la modernización parlamentaria se aceleró: los programas de modernización ya existían, pero los parlamentos ahora se mueven más rápidamente. Al mismo tiempo, explicó que las regulaciones han evolucionado para respaldar el trabajo remoto.
En este contexto, el Informe remarcó que las herramientas de votación fueron el proceso más desafiante para operar de forma remota y destacó el trabajo del Congreso argentino en el desarrollo de la aplicación para votar, al igual que sucedió en los parlamentos de España, Brasil, Reino Unido, Chile y Letonia.
Al respecto, el secretario General de Diputados, Juan Manuel Cheppi, celebró que “la modernización e innovación del Congreso argentino en pandemia es tomada como ejemplo en otras instituciones del mundo”.
“Hemos hecho un intenso esfuerzo para que el Parlamento continúe funcionando normalmente y asumimos el desafío de construir un Congreso más transparente, innovador, eficiente y cercano a las necesidades de la ciudadanía”, agregó Cheppi.
Asimismo, el secretario General destacó la incorporación de diferentes herramientas de digitalización y modernización parlamentaria: “Desarrollamos una aplicación propia con un sistema de certificación de identidad de los diputados y diputadas a partir de sus datos biométricos. Estas iniciativas nos ayudaron a mejorar el volumen del trabajo y que la actividad legislativa crezca un 70 por ciento con respecto al 2019”.
Desde el 13 de mayo de 2020, cuando se realizó la primera sesión mixta de la historia de la Cámara de Diputados, se realizaron 26 sesiones virtuales mixtas (presenciales/remotas) y una Asamblea Legislativa encabezada por el presidente Alberto Fernández.
En cuanto al trabajo de las Comisiones, se realizaron 328 reuniones durante el período 2020. Las reuniones de trabajo, tanto de sesiones como de comisiones, se desarrollaron con mayor asiduidad durante todos los días de la semana, dispuestas de forma correlativa y transmitida en directo. A su vez, se incrementó la participación activa de los legisladores en las reuniones, cuya presencia no se vio afectada por las distancias.