El sugestivo mensaje del canciller Cafiero a los embajadores extranjeros

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El nuevo canciller se presentó ante más de 75 diplomáticos apostados en la Argentina y habló del FMI, inversiones, el Papa y el G20; no habló del cepo y las trabas a las importaciones.

Fue un mensaje para mostrar una nueva Cancillería de «puertas abiertas». Agradeció el apoyo de muchos países a la Argentina por las negociaciones con el FMI, instó a promover las inversiones en el país, lanzó dardos contra Mauricio Macri aunque sin mencionarlo ditrecamente y habló varias veces del Papa Francisco

En ningún momento mencionó el espinoso tema del cepo cambiario o las trabas a las importaciones que tanto preocupa a los embajadores extranjeros. Todo esto formó parte del discurso que pronunció ayer el canciller Santiago Cafiero a todo el cuerpo diplomático extranjero apostado en Buenos Aires.

En un gesto inusual para un gobierno kirchnerista, Cafiero recibió ayer en el salón Libertador del Palacio San Martín a los embajadores extranjeros y encargados de negocios acreditados en la Argentina para emitir un mensaje optimista respecto del futuro del país y extender un puente con el mundo de cara a la nueva gestión del Ministerio de Relaciones Exteriores. 

DEUDA CON EL FMI

«Ustedes saben bien que uno de nuestros grandes problemas es la deuda con el Fondo Monetario Internacional. No la contrajo el gobierno del Presidente Alberto Fernández. Pero la afronta con seriedad el Estado cuyo jefe es el Presidente Alberto Fernández», dijo.

«Les agradezco el apoyo que muchos de sus países nos están brindando en distintos foros para que podamos resolver el problema del endeudamiento sin hipotecar el crecimiento, sin eternizar la pobreza«, agregó Cafiero sin vueltas al hablar de las negociaciones con el FMI.  

En materia de inversiones, el canciller Cafiero dijo a los embajadores extranjeros que el objetivo central planteado por el gobierno junto con el sector privado argentino es «aumentar y diversificar el intercambio comercial, potenciar las inversiones productivas recíprocas en todos los ámbitos, como el agroindustrial y el de la industria del conocimiento, y articular un trabajo conjunto entre gobiernos y el sector privado de los diversos países».

El encuentro con los 76 representantes diplomáticos en el Palacio San Martín

Sin embargo, los 76 embajadores extranjeros presentes en el Palacio San Martín esperaban escuchar alguna mención del canciller Cafiero a temas tan preocupantes para los inversores como el cepo cambiario, los problemas de empresas extranjeras para girar divisas a sus casas matrices y los inconvenientes para importar insumos. Nada de esto se escuchó de parte del nuevo canciller.

Ante los embajadores o encargados de negocios de todos los continentes, Cafiero destacó que «la respuesta a la pandemia, así como el abordaje de las crisis económicas, fiscales y climáticas del presente exigen acciones colectivas que superen la mirada y los intereses de corto plazo». 

En ese sentido, citó una frase de la encíclica Fratelli Tutti del Papa Francisco: «Simplemente hay dos tipos de personas, las que se hacen cargo del dolor y las que pasan de largo» y habló de que en adelante habrá «una Cancillería de puertas abiertas».

En otro tramo de su discurso, el jefe de la diplomacia argentina agradeció «el apoyo permanente de la comunidad internacional en la Cuestión Malvinas». Y dejó en claro que su objetivo como canciller será explorar toda vía de diálogo con la contraparte británica para reanudar las negociaciones bilaterales y poner fin a la disputa de soberanía que existe entre nuestros países sobre las Islas Malvinas.

LAS INTERNAS DEL GOBIERNO

El canciller subrayó que el «gobierno argentino es amplio, promueve la diversidad y la participación de todos y todas las voces». Claro que no hizo mención alguna en este aspecto a la derrota electoral del Frente de Todos en las PASO, el incierto futuro del gobierno para las elecciones de noviembre y mucho menos de las peleas entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner por el manejo del poder.

Algunos embajadores extranjeros consultados remarcaron que el mensaje de Cafiero resultó «muy positivo» aunque admitieron que esperaban escuchar alguna señal respecto de una apertura del cepo o las importaciones ya que estos son temas recurrentes en el diálogo con los empresarios que invierten en el país.

En el Palacio San Martín había embajadores extranjeros y encargados de negocios acreditados en la Argentina, además del nuncio apostólico, monseñor Miroslaw Adamczyk, quienes felicitaron a Cafiero por su designación como ministro de Relaciones Exteriores.

Cafiero estuvo acompañado por el secretario de Relaciones Exteriores, Pablo Tettamanti; la secretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Cecilia Todesca Bocco; el secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Guillermo Carmona y el secretario de Coordinación y Planificación Exterior, Pablo Delgado.

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