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No se engañe. No se trata de una predicción sobre el futuro que le aguarda al presidente después del 10 de diciembre, sino de la fatídica información que le dio Alberto Pérez, jefe de campaña de Daniel Scioli, a su patrón histórico. Una confirmación que pone un signo de interrogación sobre el futuro del embajador en Brasil.
En la provincia de Buenos Aires solamente hay que cubrir 35 mil mesas. A cada fiscal se le pagó, por ejemplo, en las elecciones de Tucumán 20 mil pesos, y se calcula que ese viático deberá incrementarse a 35 mil pesos en la general. Y además queda el resto del país. Más traslados de votantes y autoridades de mesa, viáticos y ausente la colaboración de los intendentes para aportar a quienes deberían desempeñar esas tareas. Y ni qué hablar del costo de afiches y boletas que deben pagarse por adelantado y en dólares. Sin caja, el desafío se vuelve una utopía.
Cierto es que algunos aportes podrían venir por el lado de Victoria Tolosa Paz. Pero con eso no alcanza. En primera instancia se había pensado como candidata a vice a Natalia De la Sota para obtener votos en la provincia más alineada con Juntos por el Cambio. Traería un apellido pero no efectivo. De todas formas se le hizo el ofrecimiento y ahí se encontraron con la sorpresa de que pidió tiempo para contestar. Sus allegados afirman que se siente más identificada con el Frente Renovador y que está a la espera de un ofrecimiento similar de Sergio Massa. De este modo, acompañar a Scioli sería una opción alternativa, pero no la primera.
El domingo, cuando se preveía una victoria contundente en Tucumán, Wado de Pedro viajó a esa provincia y se mostró en varias fotos junto a Juan Manzur. El ex jefe de Gabinete aspira a acompañar al ministro del Interior como vice. Tiene caja, pero la alternativa de una fórmula mixta entre cristinismo y massismo le juega en contra.
Al día siguiente quien fue a felicitarlo fue Daniel Scioli, para ofrecerle la candidatura a vicepresidente en su lista y pasar la bolsa. No consiguió ni una ni otra cosa.
Aunque “Pichichi” no quiera escucharlos, ya son muchos en su entorno los que le sugieren negociar una candidatura a primer diputado nacional por la provincia de Buenos Aires que incluya la jefatura del bloque del Frente de Todos. Hasta cuándo conseguirá resistir es toda una incógnita. Sólo tiene en claro que la que debe tomar la iniciativa es Cristina, ya que si él llega a pedir la reunión su capacidad de negociación se irá a pique, mucho más abajo del quinto puesto en que lo ubicaron en la lista de Unidad Ciudadana en 2017.
