El Gobierno afina mecanismos para cuidar a la industria local y desalentar la primarización

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Multiplicó valores-criterio en el comercio exterior para que las importaciones no compitan de manera desleal con la industria nacional, y además evitar subfacturaciones en las exportaciones de productos primarios. «Todos los países emplean barreras para promover proyectos estratégicos o sectores clave», afirmaron desde Adirma.

El Gobierno nacional avanzó con múltiples herramientas para cuidar la producción nacional en términos de comercio exterior. Se tratan de medidas con formalidades que evitaron el ingreso indiscriminado de productos con sustitución nacional y que, además, cumplieron la función de evitar subfacturaciones de exportaciones primarias.

Más allá de las medidas de restricción al Mercado Único Libre de Cambio que impuso el Banco Central para evitar la fuga de dólares y cuidar las reservas, que sirvieron como una suerte de para arancelaria en importaciones, la administración nacional utilizó distintos canales para imponer herramientas de «uso inteligente» del comercio exterior.

Por caso, la Aduana estableció, en las últimas horas, valores criterio para la importación de ruedas de bicicleta. La medida se incorporó al listado de otros productos que son parte de esta estrategia oficial «para revitalizar una herramienta que había sido desarticulada durante el gobierno anterior«. Y para exportación, se fijaron precios testigo para 19 complejos de productos. Así evitar subfacturación y desalentar las ventas primarizadas.

Sucede que los industriales, principalmente, pidieron al Gobierno que multiplique medidas que eviten el ingreso de productos terminados que se conviertan en competencia desleal, en momentos en donde el mercado mundial tiene excedentes. «La revitalización de los valores criterio es una decisión política para fortalecer la industria nacional así como distintas economías regionales. La herramienta ofrece sustentabilidad al proceso de reactivación económica de los distintos sectores», explicó la titular de la DGA, Silvia Traverso.

Respaldo de los industriales

Por caso, los industriales del sector óptico festejaron la decisión de implementar normativa que obliga a poner adentro de la patilla del anteojo el número de CUIT de la empresa importadora o fabricante. «Es fundamental para que la gente pueda evaluar quién es el fabricante, o quién es el responsable de la marca. Si no lo tiene, ese anteojo es trucho, estás comprando un vidrio pintado, no estás comprando un anteojo», sostuvo el presidente de la Cámara Argentina de la Industria Óptica, Norberto Fermani.

Los metalúrgicos también valoraron el respaldo a la política de sustitución de importaciones que implican «las herramientas de administración de comercio utilizadas de manera inteligente«, al sostener que sirven para «promover la producción local y también resguardando la producción de la competencia desleal». «Todos los países emplean barreras arancelarias o no arancelarias para promover proyectos estratégicos o sectores claves«, afirmó el director de Estudios Económicos de Adimra, Tomás Canosa.

Según el análisis elaborado por el área de Comercio y de Estudios Económicos de la entidad fabril, «las importaciones metalúrgicas en el tercer trimestre del año fueron de USD6.000 millones y aumentaron un 57% en relación al tercer trimestre del 2020″.

«Seguramente si no hubiera medidas para controlar los flujos en determinados nichos las compras del exterior hubieran sido mayores y por eso es indispensable una articulación público privado para avanzar en la sustitución de importaciones en aquellos segmentos donde sea posible y haya potencial y capacidades locales», aclaró Canosa.

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