En medio de la tensión con los sectores populares, Juan Zabaleta confirmó que no se otorgarán más planes sociales

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El ministro de Desarrollo Social aseguró que el esfuerzo de su cartera se depositará en el desarrollo y las mejoras del trabajo genuino. Sus palabras aparecen tras una masiva manifestación por parte de organizaciones piqueteras y partidos de izquierda en la sede del Ministerio

Después de una jornada de multitudinarias marchas de diferentes organizaciones sociales en reclamo de más puestos de trabajo y en medio de un acampe de manifestantes en la sede del Ministerio de Desarrollo Social, el titular de la cartera, Juan Zabaleta, confirmó que no se emitirán más altas de los planes sociales y que la apuesta del Gobierno estará enfocada en el trabajo genuino.

No va a haber más altas de planes sociales, pero tampoco va a haber ajuste. Estamos proponiendo aportar máquinas, herramientas e insumos para la producción para fortalecer a las cooperativas y generar trabajo”, detalló el funcionario, en declaraciones a Radio Mitre.

Zabaleta depositó la mirada central en el programa Potenciar Trabajo y en el propio desarrollo que cada beneficiado pueda llevar a cabo en su vida laboral.

“La decisión del Ministerio es permitir que cada beneficiario del Potenciar Trabajo pueda elegir en qué unidad de gestión quiere trabajar. Estamos convencidos de darles la libertad de elegir dónde quieren trabajar, en qué rubro, en qué oficio. Pretendemos darle centralidad al trabajo”, especificó.

A lo largo del último martes, numerosas organizaciones sociales y partidos de izquierda se manifestaron en las calles del centro porteño precisamente en reclamo de más cantidad de altas de los planes sociales.

Las agrupaciones, encabezadas por el Polo Obrero en el bloque de “Unidad Piquetera”, se movilizaron en las inmediaciones de las estaciones ferroviarias de Constitución y Retiro para luego confluir en la sede del Mnisterio de Desarrollo Social.

La conflictiva jornada tuvo como capítulo previo a los encuentros que hubo entre funcionarios del ministerio de Desarrollo Social y varios dirigentes de la Unidad Piquetera, reunión en la que se debatieron los reclamos centrales que llevaron los referentes territoriales. Allí se adelantó que por el momento la cartera no tenía previsto aumentar la cantidad de beneficiarios en “Potenciar Trabajo”, el programa social por el que suelen cobrar el ingreso social complementario más de un millón de cooperativistas.

Dada la magnitud de la manifestación, Zabaleta tomó el guante y trató de buscar vías de conexión con las diferentes organizaciones sociales en medio de un clima donde la necesidad de empleo de los sectores más castigados es urgente.

“A cada Unidad de Gestión le aportamos más máquinas y herramientas. Estamos vinculando el Potenciar Trabajo al empleo genuino. Y eso es lo que pedimos que acompañen a las diferentes organizaciones sociales”, afirmó el ministro de Desarrollo.

Nosotros no permitimos nunca extorsión, tampoco política de rehenes a ningún beneficiario (…) Abrimos un canal de comunicación digital y el 70 por ciento de las personas pide nuevas oportunidades, piden cambiar de Unidad de Gestión porque quieren trabajar en otra cosa, en otro rubro”, agregó.

En tanto, Zabaleta destacó la ambiciosa estrategia de urbanización de barrios populares en la que, según su relevamiento, ya forman parte unas 200 cooperativas de todo el país.La masiva movilización de organizaciones sociales llevada a cabo el último martes (Franco Fafasuli)La masiva movilización de organizaciones sociales llevada a cabo el último martes (Franco Fafasuli)

Hay más de 200 cooperativas trabajando en la urbanización de barrios populares. Y estamos ofreciendo esa posibilidad de sumarse a la urbanización de barrios que realizamos mediante la Secretaría de Integración Socio Urbana. Eso es mejorar los barrios, mover el sector de la construcción y generar empleo”, aseguró.

La tensión entre el Gobierno y las organizaciones sociales recrudeció el 8 de febrero, cuando los sectores populares expresaron el rechazo al principio de acuerdo firmado entre la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Desde las organizaciones sociales se acusa al Gobierno de Alberto Fernández de no haber cumplido con los acuerdos establecidos para los trabajadores desocupados y advirtieron que sin la emisión de nuevos planes sociales, la situación va a ser cada vez más grave.

El dirigente del Polo Obrero Eduardo Belliboni explicó el martes: “No hay asistencia alimentaria a los sectores populares de cantidad y calidad y se han cerrado a los programas sociales cuando vemos un ajuste (…) Necesitamos que nos den los recursos y que nos den una respuesta sobre el trabajo genuino“, se lamentó.

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