Sergio Massa toma el control de la Secretaría de Energía: renuncian Martínez y Basualdo

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Flavia Royón será la nueva secretaria de Energía de Sergio Massa. Martínez y Basualdo fueron apuntados como los culpables de demorar la segmentación de subsidios a las tarifas durante la gestión de Martín Guzmán.

El ministro de Economía, Sergio Massa, da otra muestra de control sobre lo que será la política económica del Gobierno. Finalmente, Darío Martínez dejará de ser el secretario de Energía para ser reemplazado por Flavia Royón quien se desempeñaba en ese cargo en la provincia de Salta. También renunció el subsecretario de energía eléctrica Federico Basualdo, funcionario que respondía al kirchnerismo y apuntado por demorar la segmentación de subsidios a las tarifas en la gestión de Martín Guzmán. El nuevo equipo energético deberá terminar de poner en marcha ese esquema y sumar el criterio por consumo. 

A través de su cuenta de Twitter, Massa oficializó la designación de Royón en Energía, que será acompañada por Santiago Yanotti como subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Bernal como subsecretario de Hidrocarburos y Cecilia Garibotti como subsecretaria de Planificación. 

Royón es ingeniera industrial por la Universidad Nacional de Salta, MBA en el IAE Business School y es diplomada en materias relacionadas a la producción y gestión integral minera, a los negocios y las metodologías ágiles. Se desempeñaba como secretaria de Minería y Energía del Gobierno de Salta y paralelamente presidía el Consejo Económico y Social de esa provincia.

“El objetivo de todos debe ser nuestra soberanía energética y la transformación de Argentina como potencia en este sector”, afirmó el ministro de Economía.

Además, Massa agradeció el trabajo del ahora ex secretario de Energía Darío Martínez, de quien era su subsecretario de Energía eléctrica Federico Basualdo y de todo el equipo del área. En particular los rumores de la salida de Martínez circularon fuerte en la última semana por una intención del neuquino de volcarse a hacer política en su provincia con aspiraciones a la gobernación.

Por su parte, Basualdo era apuntado como quien más resistió la implementación de la segmentación por ingresos que diseñó Martín Guzmán, quien en 2021 intentó echar aunque sin éxito al funcionarioy que estaba prevista en el acuerdo con el FMI para aplicar a partir de junio. Los retrasos generaron mayor necesidad de subsidios a la energía en el primer semestre, en el marco de los fuertes incrementos en el precio internacional como consecuencia de la guerra en Ucrania. 

Royón, que trabajaba como secretaria de Energía del gobernador de Salta y aliado histórico de Massa, Gustavo Saenz, deberá poner en marcha la aplicación de la segmentación por ingresos y el criterio de consumo que añadió el nuevo ministro de Economía. Los detalles finos se conocerán a partir de este martes, pero algunas pinceladas ya fueron dadas a conocer por el Palacio de Hacienda.

En primer lugar, hay 10 millones de usuarios que mantendrán el subsidio y 4 millones que no lo tendrán porque no se inscribieron en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), que ya está cerrado. 

La tarifa social permanecerá sin cambios, por lo que continuará la asistencia. En tanto, para los que no cuenten con el beneficio en este esquema, que está estimado en el 20% de usuarios, tendrán un consumo subsidiado por hasta 400 kilovatios-hora (kWh) mensuales, por lo que sí superan ese límite, deberán pagar el costo pleno por el incremental. “Superar el consumo no hace caer la base del subsidio”, explicaron desde Economía. 

La intención de Massa es tener mayor progresividad en el sistema de subsidios energéticos y promover el ahorro de energía. “El 80% de la población consume el 50% de la electricidad, mientras que el otro 20% se lleva el resto”, graficaron en el Palacio de Hacienda.

El ahorro previsto es de $500.000 millones en los próximos 12 meses a valores actuales, que equivale a casi 1% del PBI. Esta es una de las señales que Massa quiere enviar al mercado y al FMI sobre una mayor disciplina fiscal. En Economía reconocen que la meta de un déficit fiscal del 2,5% del PBI para 2022 está “desviada” 0,7 puntos por lo que eso es lo que debe “ordenar” el ministro.

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