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Sergio Massa tendrá su primera reunión para dar a los Ministerios las «prioridades de inversión y techo de gastos». El mayor recorte viene por el lado de las tarifas, que en Economía niegan sea un ajuste.
El ministro de Economía, Sergio Massa, se reunirá hoy con los responsables de la administración de todos los Ministerios para avanzar en el ajuste necesario para cumplir con la meta de un déficit primario del 2,5% del PBI para este año, que tiene un “desvío” proyectado de 0,7 puntos. Los analistas estiman que el recorte del gasto deberá ser de, al menos, 8% en términos reales para alcanzar el objetivo pactado con el FMI. Los principales candidatos al “recorte” son los subsidios, las transferencias a las provincias y la obra pública que en estos últimos dos casos muestran una resistencia política. El titular de Hacienda ya trabaja con el nuevo equipo de Energía para avanzar en la segmentación de asistencia a las tarifas por ingresos y consumo para ahorrar por lo menos 0,3 puntos del PBI hasta diciembre.
Este martes se dará la primera reunión en Economía entre Massa y los demás Ministerios para darles la programación presupuestaria hasta fin de año, en busca de marcar “prioridades de inversión y los techos de gasto”. Si bien no hubo una explicación conceptual de cómo será esta etapa, en los pasillos del Palacio de Hacienda recorre una premisa: “cada dependencia deberá arreglarse con lo que estaba previsto en el Presupuesto”.
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El encuentro cobra especial relevancia porque las proyección del nuevo equipo económico es que el “desborde” de gasto fiscal de la gestión de Martín Guzmán dejó un rojo anual proyectado de 3,2%, por lo que es necesario un ajuste de 0,7 puntos para cumplir con el acuerdo firmado con el FMI. En principio, se mantendrá el congelamiento de ingreso de agentes a la administración nacional y organismos descentralizados que había anunciado la ex ministra Silvina Batakis.
El “recorte” clave viene por el lado de los subsidios a las tarifas de energía a partir de la implementación de la segmentación que diseñó Guzmán y de un criterio por consumo. Los principales detalles del nuevo esquema que planteó Massa se conocerán este jueves y alcanzarán a la electricidad, gas y agua
Allí, según LCG, podría haber un ahorro del 0,3 puntos del PBI para el Estado hasta diciembre. La proyección oficial para los próximos 12 meses, a valores actuales, es de $500.000 millones, es decir, casi 1 punto del PBI. En tanto, Massa se reunió este lunes con los nuevos funcionarios de la secretaría de Energía, que ahora conduce Flavia Royón, para delinear los próximos pasos a seguir.
Vale recordar que casi 10 millones de usuarios mantendrán la asistencia mientras que 4 millones pagarán boleta plena. Así, la tarifa social mantendrán los subsidios. En tanto, en el caso de la luz, para los que no cuenten con ese beneficio, que son cerca del 20% de los usuarios, tendrán un consumo subsidiado por hasta 400 kilovatios-hora (kWh) mensuales, por lo que sí superan ese límite, deberán pagar el costo pleno por el incremental. El gas y el agua tendrán criterios similares.
En Economía niegan que la nueva segmentación se trate de un “ajuste”. “Nos gustaría discutirlo, si decimos que el 20% de los hogares consumen el 50% de la demanda energética y en muchos casos tienen capacidad de pago, entonces estamos haciendo Hood Robin”, comentaron a BAE Negocios desde la cartera.
Para Econviews, el gasto del segundo semestre deberá caer 7,6% en términos reales para cumplir con la meta de déficit del FMI. El ajuste deberá ser de entre $500.000 y $600.000 millones de pesos. La consultora señaló que el Fondo realizó una estimación similar, del 7,8% en términos reales, en la última revisión del programa de facilidades extendidas.
Además, Econviews afirmó que el ajuste estaría centrado en 0,4% en subsidios, compra de bienes y servicios por 0,4%, asistencia social por 0,2%, transferencias a provincias por 0,2% y otros gastos por 0,4%. En el staff report del FMI se preveía un recorte de 0,4% en gastos de capital, aunque el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis dijo que ese concepto es “intocable”. Una situación similar se da con las transferencias a provincias, resistida fuertemente por los gobernadores en las últimas reuniones con Batakis y charlas con el equipo de Massa.
