El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó de manera drástica sus números para la economía argentina y ahora prevé una caída del producto bruto interno (PBI) del 2,8% para este año tras las primeras medidas del gobierno de Javier Milei, que incluyeron una devaluación, un fuerte ajuste fiscal y una liberación de precios en la economía.
Luego de esa caída, el FMI anticipa una recuperación más fuerte en 2025, con una suba del producto del 5% respecto de este año.
El economista jefe del FMI, Pierre-Oivier Gourinchas, anticipó también una baja de la inflación a 150% anual para fines de este año y dijo en una conferencia de prensa que el ajuste fiscal que busca el gobierno nacional es “absolutamente necesario” para consolidar el descenso del costo de vida.
“La administración actual está tratando de lograr una consolidación fiscal muy considerable y está tratando de llegar a un superávit primario del 2 por ciento del PBI en este. Y eso es alrededor de cinco puntos porcentuales de ajuste del PBI en la cuenta fiscal, por lo que es un ajuste fiscal muy considerable. Y esto es algo que consideramos absolutamente necesario en el contexto de la Argentina porque la causa fundamental del proceso de inflación allí es, por supuesto, que ha habido bastante financiamiento monetario”, dijo Gourinchas.
“Entonces, para que cese ese financiamiento monetario del gobierno, las cuentas del gobierno deben consolidarse y estabilizarse”, remarcó.
Las nuevas estimaciones del Fondo para la Argentina surgen de la última actualización del Panorama Económico Mundial (WEO, según sus siglas en inglés), el informe del organismo multilateral que incluye proyecciones para todos sus países miembros, y que fue presentado este martes en Sudáfrica.
El economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, ofreció una mirada optimista sobre la economía global al señalar que la economía ha tenido un desempeño mejor al esperado, la inflación baja y el mundo se encamina hacia un “aterrizaje suave”.
Caída del 2,8% del PBI
Para la Argentina, el Fondo prevé una caída interanual del PBI del 2,8% para 2024, un recorte sustancial de más de cinco puntos respecto de su proyección de octubre último –una suba del 2,8% en el producto– debido a las correcciones que aplicó el gobierno de Milei, “un ajuste significativo de la política económica para restablecer la estabilidad macroeconómica”.