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Más de 30 países abogaron por financiamiento fortalecido para la agricultura sostenible. Fue durante la Conferencia de Ministros de Agricultura 2023, realizada en Costa Rica. El enfoque de prácticas amigables que desarrolla la provincia hoy hace eco en la región.
La Conferencia de Ministros de Agricultura de las Américas 2023 congregó a representantes de 34 países que compartieron su enfoque sobre la importancia del financiamiento internacional para la agricultura sostenible. El objetivo es que los cultivadores, especialmente aquellos de escala familiar, puedan fortalecer su resiliencia climática, adoptar prácticas amigables y contribuir a la conservación del agua y la regeneración de los suelos.
Este encuentro ministerial que se celebró en Costa Rica fue organizado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA). Además, contó con la participación de expertos de organismos financieros como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el CAF-Banco de Desarrollo de América Latina y el Banco Mundial.
En representación de Argentina estuvo Ariel Martínez, quien es subsecretario de Coordinación Política. Asistió al evento en lugar del secretario de Agricultura, Juan José Bahillo.
Mejorar la resiliencia climática
Durante el encuentro subrayaron que el financiamiento es un tema central en las negociaciones globales, ya que los costos anuales estimados para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y abordar la adaptación, resiliencia y mitigación al cambio climático en todo el mundo superan los tres a cuatro billones de dólares.
La equidad en la asignación de financiamiento climático fue un punto importante, resaltado por los representantes de Honduras y Barbados. Destacaron que se debe considerar la inequidad en la seguridad alimentaria de cada país al momento de sentarse a definir la distribución de los recursos.
Además, focalizaron en la necesidad de crear una plataforma que permita a las naciones con menos recursos acceder a financiamiento para abordar el cambio climático y mejorar la resiliencia para una agricultura sostenible. Esto se relaciona con la carencia de recursos legales, humanos y de capacidad en varios estados para acceder a estos fondos.
También enfatizaron en la importancia de la preservación. En ese sentido, propusieron la creación de mecanismos de financiamiento para intermediarios que hagan que el crédito sea más accesible, especialmente para la agricultura familiar.
Empleos verdes, innovación y agricultura digital
Los organismos financieros presentes compartieron sus estrategias para abordar la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible en América Latina. Destacaron la importancia de la inversión en sistemas alimentarios a través de mejoras tecnológicas, capacitación, resiliencia climática y biodiversidad.
El Banco Interamericano de Desarrollo propuso mecanismos como el canje de deuda por naturaleza, emisión de bonos temáticos a costos más bajos y el instrumento BID CLIMA. Este último proporciona descuentos en préstamos cuando se logran objetivos específicos de biodiversidad y clima.
El Banco Mundial, por su parte, destacó el éxito de programas por resultados aplicados en Marruecos que van más allá de la agricultura y vinculan a la agroindustria, empleos verdes, innovación y agricultura digital. Postularon una amplia gama de proyectos y servicios de asesoría para abordar las necesidades del sector agrícola en la economía en general.
La conferencia reflejó la importancia de la cooperación internacional y el financiamiento en la promoción de prácticas agrícolas más sostenibles en la región. Se trata de una política que encabeza la agenda de Misiones, que se destaca a nivel nacional e internacional por sus propuestas.
El mundo busca alternativas de agricultura sostenible
Misiones marcó una pauta en la búsqueda de alternativas más seguras y sostenibles al uso de agroquímicos en la agricultura. Con el fomento de insumos de origen natural y la capacitación del sector productivo, los resultados ya pueden palparse en las chacras de la tierra colorada.
A través de leyes, se impulsa la implementación de insumos de origen orgánico para reemplazar progresivamente la utilización de productos sintéticos. Esta estrategia sitúa a la provincia en una posición destacada a nivel nacional, regional e internacional.
Se trata de darle prioridad al cultivo amigable, capacitación y acompañamiento a pequeños y grandes productores, así como también fortalecer la protección de la flora, la fauna y el ecosistema en su conjunto. Es un abordaje integral que hace a la garantía de los buenos resultados.
El mercado global demanda alimentos sanos
La investigación y el desarrollo de insumos orgánicos para potenciar la agricultura sostenible es un hecho en Misiones. Mediante la ley de promoción de bioinsumos, la provincia busca frenar el uso de sustancias químicas en las chacras y así también los efectos nocivos tanto en el ambiente como en la salud de las personas.
El estudio de los insumos orgánicos surge por la necesidad de reducir el uso de fertilizantes y pesticidas de origen sintético. Estos tienen un efecto tóxico a corto y largo plazo, cuyas consecuencias se ven reflejadas en el ambiente y en los humanos, desde aquel que manipula el producto en el campo hasta el que consume de los cultivos.
Otra de las ventajas tiene que ver con el valor de los orgánicos en los mercados. Esto se da a partir de la demanda de los consumidores por alimentos más sanos, que a la vez colabora con detener significativamente los daños ocasionados por los químicos. Un producto orgánico sale mucho más caro que uno producido de forma convencional.
La tierra colorada es pionera en el país con el desarrollo de iniciativas tendientes a cambiar el modelo agrícola. Puso en marcha una evolución hacia sistemas sostenibles, cuya meta es proteger la salud de la gente y el entorno, sin afectar la producción y la actividad económica.
